Viernes 28 de junio / 19:00
ARTELEKU, Kristobaldegi 14, Donostia-San Sebastián (Gipuzkoa)
Este proyecto está ubicado en el municipio de Qaasuitsup, al noroeste de Groenlandia, concretamente en la zona de Upernavik. Es aquí donde estoy trabajando en la asimilación, documentación y recopilación de datos auditivos y ópticos sobre personas y ecosistemas de la zona, en relación con el hábitat narval y la importancia del narval en la historia, las leyendas y la cultura moderna de Groenlandia. Solamente ahora, al pasar 4 meses en Groenlandia he conseguido comprender la importancia de la leyenda del narval y la cultura moderna relacionada con él, así como la interconexión que todo ello tiene con los groenlandeses. Cuando los narvales inician su migración hacia el sur, hacia las aguas donde pasarán el invierno, la luz se vuelve más tenue y la bahía se cubre de una espesa capa de hielo durante los meses de diciembre, enero y febrero. La gente pasa el tiempo cantando, esperando que el hielo se endurezca y el sol vuelva a salir de nuevo. En este proyecto, mi intención es subrayar la importancia del entorno natural de la bahía de Baffin, de la población local y de los ecosistemas que puedan estar amenazados o incluso se enfrenten a la extinción.
En cuanto a forma, mi obra de arte está muy inspirada en mis propias experiencias vitales, y he desarrollado un interés especial en la forma en la que el entorno da cuenta de ella. Mi trabajo actual está constantemente influenciado por el sonido, y en ocasiones, también por el silencio. Recopilo grabaciones de campo de sonidos naturales que se producen en el entorno, y reinterpreto esta información combinando materiales de cristal, papel y piedras que he encontrado, con elementos de sonido, fotografía, video y escritura, juntamente con la actividad de escucha. Creo obras de arte que transmiten un análisis cultural con referencias a la naturaleza. A medida que la civilización se va desarrollando, la noción de silencio es algo cada vez más difícil de distinguir para las personas de a pie, especialmente por las que viven en zonas urbanas. Creo que el artista debe asumir la responsabilidad de subrayar y centrar la atención de lo que normalmente pasa desapercibido tanto óptica como visualmente.
Mara Streberger nació y se crió en Tinton Falls, Nueva Jersey (EE. UU.), y posteriormente se trasladó a Japón, hecho que tuvo un efecto significativo en su desarrollo como artista. Cuando llegó a Japón, sabía y entendía tan poco japonés que aquello la retó a desarrollar una conciencia avanzada para sintonizar con su entorno y hacerlo con la máxima sensibilidad. Tras volver a los Estados Unidos, obtuvo un Master en Arte de la mano de The Rhode Island School of Design (Rhode Island, EE. UU.). En ese momento está trabajando en un proyecto de investigación artística en Groenlandia y Dinamarca, gracias a que ha sido premiada con la beca Fulbright para el periodo 2012-2013.